Los fabricantes de automóviles europeos dependen en gran medida del acero primario basado en carbó con altas emisiones, señala
MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
Los objetivos de contenido de acero reciclado para la industria automotriz por parte de la Unión Europea, de un 30% para 2030 y un 40% para 2035, así como los requisitos de calidad de este, son técnica y económicamente viables, según un estudio de la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E).
En concreto, las instalaciones de tratamiento autorizadas y recicladores de vehículos podrán obtener hasta 125 millones de euros anuales en ingresos adicionales hasta 2035 mediante la venta del cobre extraído de los vehículos fuera de circulación.
Según recuerda la organización, en 2023 la Comisión Europea publicó una propuesta para un nuevo Reglamento sobre Vehículos al Final de su Vida Útil (VFU). Esta propuesta se basa en dos directivas existentes y pretende sustituirlas. La propuesta VFU se debatirá en el Parlamento Europeo y entre los Estados miembros en 2025 y debería estar finalizada a principios de 2026.
Para evaluar cómo aumentar el uso de acero de desecho en la industria automotriz, según la propuesta de regulación de vehículos al final de su vida útil, T&E encargó a Oeko-Institut un estudio de viabilidad específico sobre los objetivos de reciclaje de acero.
En este informe se concluye que los fabricantes de automóviles europeos dependen en gran medida del acero primario basado en carbón con altas emisiones.
Por lo que el estudio muestra que, a día de hoy, solo hay una pequeña proporción de acero secundario procedente de chatarra posconsumo en vehículos nuevos (11,3% en vehículos de combustión interna, 5,3% en vehículos eléctricos) en la UE.
En general, el informe calcula que solo el 6% de la producción total actual de acero de chatarra en la UE se destina a automóviles nuevos.
Además, estima que el acero utilizado por los principales fabricantes de automóviles europeos tiene una intensidad de emisiones igual o superior a 2 toneladas de CO2 (equivalente) por tonelada de acero, lo que supone más del doble del promedio de la industria siderúrgica de la UE (combinando las rutas primarias y secundarias).
LA CONTAMINACIÓN POR COBRE "ES UN DESAFÍO", PERO SE PUEDE SOLUCIONAR
Otra conclusión que encuentra este informe es que la alta contaminación por cobre del acero de desecho es el principal obstáculo para la adopción de acero secundario en el sector automotriz.
La industria automotriz exige acero de alta calidad con un contenido máximo de cobre del 0,1%, especialmente para componentes planos de acero; algunas piezas incluso requieren un 0,06% (por ejemplo, componentes de carrocería, como puertas, capós y techos) para cumplir con los estándares de resistencia y seguridad.
Según Steelonthenet, el 58% del peso total de un vehículo de combustión interna es acero. Los productos planos de acero representan el 46% y los productos largos, el 11%.
El contenido promedio de cobre en la chatarra de acero de la OCDE oscila actualmente entre el 0,2% y el 0,25%. La concentración de cobre en la chatarra triturada de vehículos al final de su vida útil (VFU) puede oscilar entre el 0,23% y el 0,7%.
Un ensayo de clasificación de chatarra triturada realizado por ArcelorMittal mostró un contenido de cobre del 0,6%. "Esta alta contaminación por cobre impide el uso de acero reciclado en aplicaciones automotrices", indica el estudio.
El sector automotriz, por tanto, requiere técnicas eficaces de eliminación de cobre de la chatarra de acero para permitir la producción de acero reciclado de alta calidad, adecuado para sus necesidades, añade.
Aproximadamente, el 60% del cobre de un vehículo se encuentra en el mazo de cables y en el motor, por ejemplo, en los sistemas de ventilación y calefacción.
"Si se pudiera retirar aproximadamente el 50% del mazo de cables principal antes de la trituración, esto, junto con el desmantelamiento de los motores y generadores eléctricos de los vehículos eléctricos, podría reducir el contenido de cobre en la chatarra de acero de aproximadamente el 0,4% al 0,2%", sostiene el informe.
EL TRATAMIENTO DEL COBRE "PUEDE SER ECONÓMICAMENTE VIABLE"
En este sentido, la comparación de los costes adicionales con los posibles ingresos adicionales muestra que la separación del cobre podría ser económicamente viable actualmente tanto para las empresas de reciclaje de vehículos como para las plantas de clasificación posteriores a la trituración.
"Que esto no ocurra se debe a que dicho procesamiento posterior requeriría una inversión adicional para las empresas trituradoras, lo que no resulta económico dada la baja demanda actual de chatarra de acero de alta calidad", afirma el estudio.
Sin embargo, el informe también muestra que si existe un mercado para el acero de alta calidad, a través de objetivos obligatorios de contenido reciclado, entonces serán económicamente viables inversiones adicionales.
Además, señala el estudio que hay suficiente chatarra de acero disponible para los objetivos de contenido reciclado. Las cantidades de acero reciclado que pueden recuperarse de los vehículos fuera de uso en la UE serán suficientes para alcanzar un objetivo de contenido reciclado en el sector de la automoción del 30% a partir de chatarra posconsumo de circuito cerrado para 2030 y del 40% para 2035.
El potencial de reciclaje de ciclo cerrado de vehículos fuera de circulación en la UE podría ser significativamente mayor que en la actualidad, explica el estudio.
Los datos de Eurostat que recoge muestran que solo el 50% de los vehículos comercializados en la UE se eliminan y reciclan en el mercado eu