MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
La compañía de prestación de servicios de asistencia jurídica Legálitas ha avisado a los propietarios de vehículos afectados por el caso del software de Volkswagen que manipula las emisiones de motores diésel que sus automóviles podrían tener que volver a pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).
Legálitas indicó que el caso Volkswagen es "un ejemplo claro de cumplimiento defectuoso de contrato", puesto que el vehículo vendido no cumple con las características que motivaron su compra y que figuran en el contrato.
Además, la entidad alertó de que existen otras consecuencias importantes para los propietarios de los vehículos afectados, como que podrían tener que volver a pasar la ITV, en caso de que se modificaran las características del vehículo, como ocurriría si éste se quedara con una menor potencia una vez modificado.
Al mismo tiempo, señaló que el coche podría pasar a tener un valor inferior una vez ajustado, al tiempo que resaltó que el usuario puede incurrir en un mayor gasto de carburante, en el caso de que con dicha intervención se le instale un nuevo sistema de control de emisiones.
En este sentido, la compañía indicó que, una vez modificado, el automóvil afectado podría pasar a contaminar más de lo que consta en su ficha, aunque esté dentro de la legalidad, por lo que tendría que afrontar una tarifa superior en parquímetros de ciudades como Madrid, en la que el coste está ligado a las emisiones.
Legálitas afirmó, a su vez, que llevar el coche al taller para su reacondicionamiento puede ocasionar otros gastos, como en el transporte alternativo, al tiempo que destacó que si se le bajara la potencia al coche se pagaría menor en el impuesto de vehículo de tracción mecánica.
RECLAMACIONES.
Ante estos casos, la firma indica que los clientes afectados podrán realizar una reclamación a Volkswagen del pago de una indemnización que cubra los daños y perjuicios sufridos, con una cifra que variará en función del nivel de daños.
Por ello, la compañía afirmó que Volkswagen debe asumir la responsabilidad de las garantías a la hora de readaptar el vehículo afectado, realizando dicha operación en sus talleres oficiales, así como en el plazo de tiempo más breve posible y sin coste alguno para el usuario.
Además, afirmó que Volkswagen debe prestar una garantía de tres meses ó 2.000 kilómetros al cliente por dicha operación de reacondicionamiento. Los clientes también tendrán derecho a ser reembolsados por los posibles daños y perjuicios ocasionados.
