BRUSELAS, 12 (EUROPA PRESS)
Las emisiones totales de dióxido de carbono (CO2) derivadas de la producción de vehículos han disminuido casi un 24% desde 2008, pese a que el número de automóviles fabricados aumentó de 11,9 millones en 2013 a 17 millones el año pasado.
Asimismo, por cada automóvil ensamblado en la última década, el consumo de agua se redujo en aproximadamente un 31%, gracias al uso de tecnologías de recirculación para la reutilización de agua y otras estrategias a largo plazo, según datos la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA).
ACEA recalca que, a medida que los automóviles incorporan más funciones para que sean más 'limpios', seguros e 'inteligentes', la producción de coches se ha vuelto "más compleja".
"Pese a esto, el consumo de energía por automóvil producido ha disminuido casi un 16% en los últimos diez años y cantidad de residuos generados por vehículo ensamblado casi un 14%", destaca la asociación europea.
El secretario general de ACEA, Erik Jonnaert, señaló que este "historial positivo" demuestra el "fuerte" compromiso de la industria del automóvil por reducir el impacto medioambiental tanto en el uso del vehículo como en los procesos de producción.