MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
La facturación de los talleres españoles creció un 2,7% en 2017, hasta alcanzar los 12.100 millones de euros, aunque se moderó respecto a los crecimientos registrados por el sector en 2015 (+3,7%) y 2016 (+3%), según datos de Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción (Conepa).
En cuanto al número de operaciones registradas, los talleres nacionales reportaron un 4,3% más de entradas de vehículos a sus instalaciones durante el año pasado.
Conepa advierte de que la diferencia entre la subida del número de reparaciones en relación con las ventas (+2,7%) muestra una pérdida de rentabilidad considerable que "preocupa" a las empresas especializadas en la reparación y mantenimiento de vehículos y "empaña" el dato objetivo de incremento de la facturación en el sector.
Por otro lado, la federación también pone de manifiesto la diferencia de comportamiento que tuvo lugar entre los dos semestres de 2017, con un 3% de crecimiento entre enero y junio y un 2,4% entre julio y diciembre.
Conepa resalta que, por especialidades, también se produjo un cambio de tendencia entre los dos semestres del año anterior. Mientras que en el primero, los datos mostraron "bastante uniformidad" en la electromecánica y la carrocería, con una leve ventaja de la primera sobre la segunda, entre julio y septiembre fue la demanda de trabajos de chapa y pintura la que "mejor evolución" registró.
"No se aprecian diferencias significativas por áreas territoriales. Sí la hay, y considerable, cuando se analizan los resultados de las empresas ubicadas en núcleos urbanos y los de los talleres situados en zonas rurales (con cifras de crecimiento en torno a medio punto por debajo)", subraya Conepa.
Respecto al empleo, el sector registró una subida del 3% el año pasado, hasta alcanzar los 148.000 trabajadores, según estimaciones de la federación.
Para 2018, Conepa estima un crecimiento similar al que los talleres españoles experimentaron en 2017, aunque muestra "especial preocupación" por la pérdida de rentabilidad, en un momento en el que el sector ha de prepararse para afrontar notables inversiones con el fin de dar respuesta a las necesidades de los vehículos modernos.
