MADRID, 7 Jul. (OTR/PRESS) -
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha vuelto a arremeter contra Colombia y su presidente Juan Manuel Santos. En uno de esos discursos grandilocuentes a los que está acostumbrado el dirigente venezolano, aseguró el jueves que Colombia se fundó en Venezuela y que, por esa razón, él es "padre" del mandatario colombiano a quien ha ordenado que le pida "la bendición" y se arrodille ante él.
"El presidente Santos me tiene que pedir la bendición compadre, porque somos sus padres. Santos, pide la bendición, compadre. Inclínate, híncate ante tu padre. Soy tu padre", ha dicho Maduro durante un acto con trabajadores de la ciudad de Guayana, del estado de Bolívar al sur del país y en el que logró arrancar el aplauso de los presentes.
Las declaraciones del líder chavista tienen lugar en un momento de extrema tensión entre ambos dirigentes tras una serie de enfrentamientos verbales a causa de la situación actual de Venezuela."Lo que hoy somos Venezuela (antes era) Colombia, Panamá y Ecuador. Éramos una sola unión de república", ha asegurado, Constitución venezolana en mano, en una alocución retransmitida por la estatal Venezolana de Televisión (VTV). "Colombia se fundó en el Orinoco, y ustedes son los padres de Colombia. Nuestros abuelos fueron los que fundaron Colombia", ha asegurado.
En este contexto, y tras 'recordarle' a Santos que él es su "padre", Maduro le ha exigido que deje "la maldad contra Venezuela".El Gobierno chavista volvió a acusar esta semana a Colombia de intervenir "sistemáticamente" en sus asuntos internos y aseguró que el Ejecutivo de Santos mantiene "estrechas relaciones" con la oposición venezolana y que está conspirando "contra la paz" en el país.
En un comunicado, el Gobierno de Maduro señaló que el gabinete del presidente Santos "viene interviniendo sistemáticamente en los asuntos internos de Venezuela, tanto a nivel bilateral como multilateral", efectuando "gestiones internacionales para propiciar una intervención en Venezuela".
Asimismo, señaló que Santos "mantiene estrechas relaciones con la oposición venezolana", a la que apoya "de diversas maneras". "Y conspira contra la paz en Venezuela, mientras el Gobierno venezolano ha propiciado, de manera determinante, la paz en Colombia", lamentó.El Ejecutivo de Maduro recordó entonces la "gravedad" que supone "infringir principios fundamentales del Derecho Internacional tales como la no injerencia en los asuntos internos, la autodeterminación de los pueblos y el respeto a la soberanía de los Estados".
Así, pidió a Santos que "cese" en sus "acciones injerencistas" y, por el contrario, emprenda un "nuevo rumbo de paz, respeto y buenas relaciones bilaterales en favor de la prosperidad" de ambos pueblos.Santos llamó este fin de semana a que Maduro se sentara con la oposición para negociar "una salida pacífica y negociada" a la crisis social y política que vive el país, proceso para el cual ofreció la ayuda de Colombia y de la comunidad internacional.
Tan sólo unos días antes, el Gobierno colombiano volvió a criticar el "alto grado de conflictividad y violencia" existente en Venezuela en los últimos tres meses y, en particular, condenó los ataques registrados el martes contra la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), la Fiscalía General y la Asamblea Nacional, tres actos separados.
DOS VICEFISCALES, ¿CUÁL ES EL LEGÍTIMO?
Y es que la situación de total hostilidad que se vive en Venezuela desde hace tres meses abarca todos los ámbitos. El país no sólo está enfrentado en las calles, también las instituciones parecen irreconciliables.
Dentro del poder judicial, la colisión es más que evidente entre el Tribunal Superior de Justicia y la Fiscalía General. El Ejecutivo y el Legislativo no pueden mantener posturas más opuestas y mientras, 91 muertos son el triste balance de la crisis absoluta que padece el país caribeño después de meses de continuas protestas.
En una vuelta de tuerca que evidencia la situación surrealista que vive Venezuela cabe preguntarse cuál de los dos vicefiscales nombrados desde diferentes organismos es el legítimo. Por un lado, el vicefiscal designado por la Fiscalía General, destituido por Maduro y ratificado por el Parlamento y por otro lado, la vicefiscal nombrada por el TSJ y que no reconocen ni la Asamblea Nacional ni el Ministerio Público.
El jueves, la Fiscalía que dirige Luisa Ortega impidió el acceso al organismo de la vicefiscal designada por el Supremo. En este sentido, El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, ha acusado al TSJ de Venezuela de carecer de autoridad suficiente para designar a Katherine Harrington, la ahora 'número dos' de la Fiscalía que sustituye a Rafael González Arias, ascendido a mediados de junio por la fiscal general, Luisa Ortega Díaz.
En un breve comentario publicado en su cuenta oficial de la red social Twitter, Almagro ha asegurado que esta decisión es "otra flagrante violación a la Constitución que no puede ser aceptada". "El TSJ no tiene autoridad. Es la Asamblea General quien sí la tiene", ha agregado.
La fiscal Harrington no ha podido acceder el jueves a la sede del Ministerio Público, en un nuevo capítulo del pulso que libra esta institución con el chavismo. Harrington fue designada por la Sala Constitucional del Supremo después de que la Justicia anulase el nombramiento como vicefiscal de González Arias que sí ha validado la Asamblea Nacional controlada por la oposición.
En este contexto, la propia Ortega Díaz ha denunciado "la pretensión arbitraria de la vicefiscal nombrada por el TSJ de ingresar al Ministerio Público".
Asimismo, ha responsabilizado tanto a la Guardia Nacional Bolivariana como al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN)