(EFE)
Pons añadió que "hay una absoluta falta de sensibilidad sobre la importancia del neumático en el contexto de la seguridad del automóvil".
Sobre esta denuncia explicó que hay un importante desconocimiento entre la mayoría de conductores sobre la presión adecuada de los neumáticos a los que debe circular su coche, y ésta es una información esencial, no sólo desde la perspectiva de la seguridad, sino de la economía, por el gasto superfluo que genera una rueda con exceso o defecto de presión.
El presidente del consorcio del caucho, en el que se integran los fabricantes de neumáticos instalados en España como Michelín y Bridgestone, además de otras marcas relevante como Continental, Goodyear y Hankook, señaló a EFE que el sector se había enterado por la prensa de la iniciativa del Gobierno de poner en marcha un Plan Renove de neumáticos.
Pons indicó que esta iniciativa es buena por lo que va a tener de concienciación para los conductores en lo relativo a un buen mantenimiento de los neumáticos, pero reconoció que "se queda corta", porque beneficiará a 240.000 neumáticos, cuando el mercado anual de reposición mueve 18 millones de unidades.
Otro inconveniente reconocido por Pons es que el anuncio ha paralizado las ventas en espera de que se apruebe la medida y los conductores se puedan beneficiar de los 20 euros de subvención que aplicará el Gobierno por cada neumático.
Pons reveló que el Gobierno aplicará la medida sólo si se procede al cambio de las cuatro ruedas del vehículo, por lo que el montante de la ayuda será de 80 euros, y añadió que los beneficiarios serán exclusivamente personas físicas, quedando excluidos personas jurídicas, es decir empresas de alquiler o de renting y otros gestores de flotas.
Sobre la falta de concreción en la tipología de neumáticos a los que se ofrecerán las subvenciones, Pons aclaró que "los cinco fabricantes que están en el consorcio tienen gama de producto para atender el Plan".
A este respecto, hay que recordar que los fabricantes de neumáticos, integrados en este consorcio del caucho, han incidido en que los criterios de elección de neumáticos susceptibles de ayuda deben poner el acento en la capacidad de agarre al firme, como elemento de seguridad, en la baja rodadura, como factor de control del consumo, y en el ruido de rodadura, como efecto medioambiental, las tres razones con las que se trabaja en la etiqueta europea que debe estar vigente en noviembre de este año.
Pons no eludió un problema al que se enfrenta la industria mundial del neumático: la fuerte subida del caucho, su materia prima, en los mercados internacionales.
Esta subida, según Pons, en el último año ha sido de un 100 %, al que hay que añadir un porcentaje similar en los últimos cuatro años.
Para Enrique Pons, esta tensión de precios en la materia prima tiene su explicación en la subida de los precios del petróleo, en la obsolescencia de las plantas europeas de producción de caucho que las hace poco rentables y obliga a la construcción de nuevas en mercados emergentes, así como en la "tremenda" demanda que sobre el producto han ejercido las economías china e india.
El presidente del consorcio no es optimista sobre una rápida corrección de la situación, que está obligando a los fabricantes de neumáticos a subir precios, pues "nos tememos que no es flor de un día. Estas tensiones van a durar bastante tiempo".
