Tordera.- Cientos de coches estacionados a lo largo de la N-II en el Maresme, con un inocente rótulo de venta "de particular a particular" en sus cristales son en realidad el cebo de un entramado mafioso impulsado por clanes extranjeros para vender vehículos que en su mayoría deberían estar en el desguace y cuya circulación supone un grave peligro para la seguridad del tráfico, según denuncia la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos (Ancove), que ha pedido la implicación de los ayuntamientos para erradicar este tipo de venta fraudulenta.
"El 60% de los vehículos de segunda mano se venden a través de redes mafiosas" apunta el presidente de Ancove, Elías Iglesias. Según un estudio de la entidad, en España se detectaron hasta 18 grupos organizados, generalmente clanes familiares de origen extranjero que aprovechan la legislación permisiva y la laxitud de las administraciones locales para trasladar los vehículos a aquellas zonas donde las ordenanzas no prohíben "el inocente estacionamiento con el rótulo de coche en venta".
Ancove insiste ante los alcaldes del Maresme Norte, la zona donde han detectado el mayor incremento de coches en venta "especialmente en los márgenes de la N-II" y alerta sobre la falta de seguridad que supone la circulación de estos vehículos obtenidos en subastas de embargos, al por mayor o bien de comercios que los habían dado de baja. "Falsifican la ITV y los vuelven a revender y cuando el coche tiene problemas, al cabo de unos días, el teléfono del vendedor ya no es válido" detalla Iglesias, que a su vez recuerda "que si la venta ambulante está prohibida, ésta también debería estarlo".
Ordenanzas sancionadoras
Municipios como Palafolls, Tordera, Malgrat de Mar o Pineda se han comprometido a impulsar medidas ya que sus ordenanzas no contemplan la competencia desleal que supone la venta de coches en la calle para los comerciantes establecidos legalmente. Además, según Iglesias "implica también un perjuicio para los ayuntamientos que dejan de cobrar impuestos". En Santa Susanna, por ejemplo, el ayuntamiento ya ha modificado la ordenanza para aplicar sanciones de hasta 600 euros por este tipo de compraventa fraudulenta.
En el Maresme, los establecimientos legales de compra-venta, han pedido la intervención de Ancove ya que "están desesperados, llevan meses sin vender un solo coche" pero además, apunta el presidente de Ancove "deben soportar que ante sus puertas se estacionen coches con el rótulo de venta". Se ha dado el caso, que los comerciantes que han intentado denunciar estos hechos "después han recibido actos de vandalismo en sus establecimientos" por lo que la situación "es grave, ya que puede generar conflictos violentos".
El proceder de estos clanes para vender el vehículo pasa por contactar con el interesado a través de un teléfono móvil de tarjeta. A continuación, le piden al comprador su DNI para realizar el cambio de nombre "un trámite que hacen desde una gestoría" lo que para el nuevo propietario puede ser una garantía, "pero en realidad el gestor sólo tramita un contrato privado".
Precisamente, los Mossos d'Esquadra han desarticulado recientemente una trama de falsificación de documentos de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) después de detectar un incremento significativo de vehículos circulando con etiquetas de la revisión obligatoria falsas en el Maresme y la Selva. El operativo, permitió desmantelar dos clanes organizados "muy activos" con base en Tordera (Maresme) Tarragona, detener a 47 personas e imputar a otras 78 vinculadas con la falsificación.
FUENTE: Lavanguardia.com
