MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El grupo automovilístico BMW ha anunciado un ambicioso plan de reducción global de sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) en todas sus operaciones, con el objetivo de disminuir en al menos un 33% sus emisiones totales por vehículo para 2030, en comparación con 2019.
Tal como anunció la empresa este miércoles, BMW evitará la emisión de más de 200 millones de toneladas de CO2 para 2030, lo que equivale a más de 20 veces las emisiones anuales de una ciudad con más de un millón de habitantes, como es el caso de Múnich (Alemania).
Para ello, la compañía está reduciendo la huella de carbono de sus modelos a lo largo de todo su ciclo de vida, desde la extracción de las materias primas, pasando por la fase de producción y uso, hasta el reciclaje al final de su vida útil.
"Un automóvil respetuoso con el clima no se crea únicamente mediante el uso de energía verde. Debemos diseñar nuestros vehículos para la sostenibilidad desde el primer día de desarrollo: reduciendo la cantidad de materiales utilizados y, sobre todo, planificando su reutilización y reciclaje desde el principio", ha indicado el presidente de BMW, Oliver Zipse.
En este sentido, la empresa planea llevar la sostenibilidad a un nivel "radicalmente nuevo" en sus modelos 'Neuse Klasse' desde mediados de década para reducir significativamente el consumo de recursos. El objetivo es utilizar materiales reciclados.
También busca reducir la huella de carbono de las baterías eléctricas, ya que reconoce que para su producción se consume mucha energía. Así, no solo busca utilizar energía 'verde', sino utilizar materiales reciclados.
OBJETIVOS
Entre sus objetivos, para 2030 la producción y sus plantas de todo el mundo reducirán un 80% las emisiones medias de CO2 directas e indirectas por vehículo, mientras que su cadena de suministro lo hará en un 20% para esa fecha.
Además, sus modelos reducirán más de un 40% sus emisiones por kilómetro mientras son utilizados y en general, todo el ciclo del vehículo reducirá un 33% sus emisiones para 2030, en comparación siempre con 2019. Para ese año, BMW espera que al menos el 50% de sus ventas sean modelos 100% eléctricos.
"Ya hemos reducido nuestro consumo de energía por vehículo producido en más de un tercio de los niveles de 2006 e incluso pudimos reducir las correspondientes emisiones de CO2 por vehículo producido en más del 70%", ha destacado Zipse.
