(EFE)
El comité, controlado por CCOO, considera que aceptar esta propuesta implicaría asumir la pérdida de alrededor del 40% de los puestos de trabajo de la fábrica, cuando su objetivo es garantizar el máximo de empleos posibles, según señala este sindicato en un comunicado.
La propuesta, realizada en una reunión que sindicatos y empresa mantuvieron el pasado viernes, 15 de abril, es la primera que implica mantener puestos de trabajo en Barcelona que ha realizado Yamaha desde que presentó el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ante la Generalitat, que prevé cerrar su planta en Cataluña, en la que trabajan 388 personas.
En su plan inicial, la multinacional planteaba cerrar la planta de Palau y trasladar la producción en su fábrica de Saint Quentin (Francia), donde se podrían recolocar a un máximo de cien empleados.
El comité sólo acepta, de momento, la salida voluntaria y remunerada mediante bajas voluntarias y prejubilaciones de alrededor del 12%, cediendo para ello a Francia la producción de algún modelo.
Por otra parte, el plazo dado para resolver el expediente de Yamaha por parte del departamento de Empresa y Empleo se ha prolongado diez días más
