Las copañías de renting esperan tocar fondo en 2011 y empezar a remontar

(LA GACETA)
El renting del automóvil cuenta con cifras que recuerdan su peso dentro de la econo­mía española y de la pro­pia automoción, tal y como comentaba ante las cáma­ras Chimo Ortega, direc­tor del Área de Motor del Grupo Intereconomía, respondiendo a las prime­ras preguntas de Luis Vicente Muñoz, director de la cadena de televisión y moderador del encuen­tro: el sector del renting facturó el año pasado 4.475 millones de euros y matriculó casi quinientas mil unidades, sobre todo de vehículos del segmento C y de comerciales ligeros, aquellos que son los más solicitados para flotas por las empresas.

Luis Vicente Muñoz abrió el debate haciendo referencia al mal momen­to que pasa el sector de la automoción y pidiendo a sus invitados una opinión sobre el 2011. César Estre­la, director de Operacio­nes de Arval, dijo al res­pecto: “Yo hablaría del comienzo de la recupera­ción, pero de una recupe­ración lenta”. Por su parte, Ignacio Barbadillo, conse­jero delegado de Lease­Plan. puntualizó: “Más que hablar de recupera­ción, yo hablaría de conso­lidación, de no seguir bajando y de esperar que los clientes hayan tocado fondo; es un año de tocar suelo”. La opinión de Pedro Malla, director general de ALD: “Yo creo que es el año de la consolidación. No puede ser peor que el 2010, ni que el 2009, que también fue un año muy duro; esperemos que el año 2011, y después el 2012, se terminen consoli­dando y haciendo mejorar al sector”. Agustín García, presidente de la AER, por su parte, expresó la espe­ranza del sector: “Espere­mos que sea el año de la consolidación y que no bajemos mucho más, aun­que prevemos todavía bajar un poco, pero espe­remos que sea sólo en el primer semestre y luego empecemos a remontar”.

Chimo Ortega habló de lo útil que puede ser el ren­ting como herramienta para las empresas, puesto que ayuda a reducir costes, a llevar un correcto man­tenimiento de los vehícu­los, a no asumir riesgos con los usados, a controlar gastos, como el combusti­ble y a permitir que los clientes se dediquen a su actividad principal.

Pero, y a pesar de sus ventajas, las cosas no han ido muy bien para el sector porque la crisis ha golpea­do con fuerza al renting, ya que toca dos áreas tan estratégicas como afecta­das, la financiera y la del automóvil. Los invitados han opinado que el renting es un buen reflejo la eco­nomía, puesto que cuando las empresas van mal y se reduce el empleo, se nece­sita menos vehículos y el descenso de flotas, así como el alargamiento de los contratos, evidencian el momento económico.

El hecho de que la crisis forzara a una escasez de liquidez, provocó que el renting dejara de ser prio­ritario y tan rentable. Las empresas ampliaron el periodo de contrato y asu­mieron más riesgos. Los activos financieros, ade­más, cayeron fuertemente al devaluarse el precio de los vehículos usados. Por otro lado, la crisis ha reconvertido al renting, de forma que ha habido una concentración de negocio hacia empresas especializadas, como afir­maba el presidente de la AER. Ahora el 95% del negocio del renting en España está en manos de las 10 compañías más importantes, según los datos aportados por Chimo Ortega, pero nin­guna de ellas, ni siquiera entre las tres presentes en el especial informativo, tiene una cuota de merca­do de más del 20%, como dijo Ignacio Barbadillo, para quien la reconversión del sector es buena y hace que el producto, en manos de empresas especializa­das, esté más presente en el mercado, de una mane­ra más eficaz y mejor para el cliente. Sin embargo, también recordó lo impor­tante que es la innovación que aporta el renting a la automoción, a la eficiencia y a la movilidad.

El diferencial entre las empresas para el futuro, puesto que todas acceden a los mismos vehículos, será una cuestión de servi­cios, para Pedro Malla. César Estrela, por su parte, recordó el impor­tante papel de asesor que hace la compañía de ren­ting en cuanto a las flotas de sus clientes. Ag

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